Foto: @campeonatoAUF

Redacción: Santiago Alza

 

Tres goles, y otros tres puntos.

Peñarol doblegó a Cerrito por 3 a 1 en el estadio Campeón del Siglo, en un lluvioso partido que destacó por los errores que cometieron ambas escuadras a la hora de los goles.

El de hoy fue el primero de los dos encuentros como local sin hinchada, por la sanción que recibió el manya, después de los disturbios de conocimiento público que sucedieron en el partido frente a Nacional hace exactamente dos semanas.

El carbonero llegó a 15 puntos en el Torneo Clausura, y a 52 en la Tabla Anual, intentando sellar su pasaje a la Copa Libertadores 2023. Mientras tanto el conjunto auriverde, ya matemáticamente descendido, sigue siendo el único equipo que aún no conoce la victoria en este torneo corto, y se mantiene en la última posición con sólo 2 puntos.

El DT de Peñarol, Leonardo Ramos, paró en la cancha un 11 que tuvo tres cambios respecto al partido del pasado jueves contra Liverpool, que terminó con victoria por 1 a 0. Los mismos fueron Juan Ramos, Sebastián Cristóforo y Ruben Bentancourt, por Valentín Rodríguez, Nicolás Milesi y Lucas Viatri respectivamente.

Por su parte, el conjunto dirigido por Roland Marcenaro, salió al partido con un gran número de variantes (seis), comparando su último partido, en el cual perdió contra el equipo de Fénix por 2 a 0, también el jueves. Los ingresos más notorios fueron los del ex jugador de Defensor Sporting, y de la selección sub 20, Owen Falconis, y del ex jugador de Peñarol, Franco Martínez.

Los primeros minutos del partido transcurrieron con el equipo mirasol con el control de la pelota, pero sin grandes ocasiones contra el arco defendido por Nicolás Gentilio.

Recién en el minuto 15 del partido, llegó la primera chance clara para el aurinegro, a través de un buen tiro cruzado de Nicolás Rossi que desvió al tiro de esquina el golero Gentilio.

En el minuto 18 llegó la primera emoción del partido. El jugador Anthony Sosa cometió una falta bastante evitable sobre Brian Lozano en el área, y luego de una larga revisión en el Var, que duró unos 3 minutos, el árbitro Santiago Motta decidió cobrar la pena máxima, además de mostrarle una tarjeta amarilla a Sosa.

El tiro penal fue ejecutado por Bentancourt, quien definió a su izquierda, haciendo estéril el vuelo del arquero de Cerrito, que se lanzó al otro lado.

Pero la alegría no duraría demasiado. Rápidamente, en el minuto 26, un mal pase hacia atrás dado por Ezequiel Busquets, dejó mano a mano a Flavio Scarone contra los defensas aurinegros, a los que superó fácilmente en velocidad, y definió de buena manera frente a la desesperada salida de Kevin Dawson. De esa forma llegó a su primer gol en el torneo.

Peñarol sintió el impacto del gol, e inmediatamente salió a buscar el segundo, pero sin éxito. A su vez Cerrito (vía Scarone y Falconis), siguió explotando los huecos defensivos que dejaba el carbonero a la hora de atacar (varias veces llegaron a quedar los dos delanteros cerritenses contra los dos zagueros manyas, a la hora del contragolpe).

El carbonero terminó el primer tiempo haciendo varias faltas sin sentido, como resultado de la impotencia.

El técnico Ramos ni siquiera quiso esperar a un posible transcurso del segundo tiempo, por lo que dió pista a dos nuevos futbolistas en el entretiempo. Éstos fueron Rodrigo Rivero y Brian Mansilla (el anotador del gol de la victoria contra Liverpool), mientras que los jugadores que salieron, fueron Rodrigo Saravia y Nicolás Rossi. La idea del DT era volver al doble 9, pero arriesgando aún más en la parcela defensiva.

En el minuto 47 Peñarol tuvo una chance muy clara, producto de un gran tiro libre de Lozano desde unos 34 metros, que terminó chocando contra el poste izquierdo. Fue quizás la única gran acción correspondiente a su nivel, ya que estuvo bastante errático.

Cerrito también tuvo la suya, con un centro de Franco Martínez, que Scarone no logró conectar de buena manera y terminó saliendo muy cerca del palo izquierdo.

Pero de la nada, el carbonero encontró el segundo gol del partido, a través de un centro como cualquier otro pero

que sorprendió a todos, incluido al guardameta Gentilio, quien cometió un grave error al no reaccionar a tiempo para despejar la pelota, que entró por su palo más cercano. El autor del centro-gol fue Busquets, quien pudo redimirse del error que cometió en el primer tiempo. Como dice aquella frase ya de antología: "El fútbol da y el fútbol quita" .

Con el gol, Peñarol se envalentonó, y aunque seguía sin jugar bien, al menos tenía el control de la pelota y del partido.

Marcenaro intuyó que la manera más efectiva de hacerle daño al manya, era a través del contraataque, por lo que sustituyó a sus dos delanteros (Falconis y el goleador Scarone), que ya estaban algo cansados, por Esteban Da Silva y Bruno Martín Correa.

Por el otro lado, Ramos vió lo mismo, y decidió reforzar la mitad de la cancha otra vez. Ignacio Laquintana y Agustín Álvarez Wallace entraron en el aurinegro, por Kevin Méndez y Cristóforo respectivamente.

Cerrito agotó los cambios para intentar responder. Salieron Andrew Zamorano, William Klingender y Carlos Pimienta, e ingresaron Fabio Sastre, Adrián Leites y Alejandro Villoldo (éste último con varios goles en su haber contra los carboneros).

A pesar de todas estas variantes, ninguna de ellas (en ambos cuadros) lograron gravitar de manera memorable.

Quizás lo más destacado de la noche fue el último cambio de Peñarol, ya que para jugar los últimos 10 minutos, ingresó Santiago Homenchenko, uno de los integrantes del plantel que salió campeón de América de la categoría sub 20. El jugador que salió para darle lugar, fue Lozano.

Cuando el partido estaba ya en sus últimos compases, el delantero Bentancourt fue derribado por Matías Soto en el área, y el árbitro Motta decretó el tiro penal, ante las protestas de Gentilio que recibió una tarjeta amarilla por protestar.

Bentancourt fue el encargado de patear otra vez, y de nuevo lo convirtió a su izquierda, venciendo la resistencia del arquero rival, que ésta vez adivino sus intenciones pero no pudo hacer nada. De esa manera el salteño llegó a su octavo gol en el torneo, y cerró el telón del partido.